HAFTARÁ Yitró
Jabad y Sefaradim: Ieshaiá (Isaías) 6:1-13
Ashkenazim: Ieshaiá (Isaías) 7:1-6; 9:6-7
Llamamiento de Ieshaiá, Aram y Efraim atacan Ierushaláim y la salvación
Isa 6:1 En el año de la muerte del rey Uzías vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y la orla de su manto llenaba el templo.
Isa 6:2 Por encima de El había serafines; cada uno tenía seis alas: con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies y con dos volaban.
Isa 6:3 Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, Santo, Santo, es el SEÑOR de los ejércitos, llena está toda la tierra de su gloria.
Isa 6:4 Y se estremecieron los cimientos de los umbrales a la voz del que clamaba, y la casa se llenó de humo.
Isa 6:5 Entonces dije: ¡Ay de mí! Porque perdido estoy, pues soy hombre de labios inmundos y en medio de un pueblo de labios inmundos habito, porque han visto mis ojos al Rey, el SEÑOR de los ejércitos.
Isa 6:6 Entonces voló hacia mí uno de los serafines con un carbón encendido en su mano, que había tomado del altar con las tenazas;
Isa 6:7 y con él tocó mi boca, y dijo: He aquí, esto ha tocado tus labios, y es quitada tu iniquidad y perdonado tu pecado.
Isa 6:8 Y oí la voz del Señor que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí: Heme aquí; envíame a mí.
Isa 6:9 Y El dijo: Ve, y di a este pueblo: "Escuchad bien, pero no entendáis; mirad bien, pero no comprendáis."
Isa 6:10 Haz insensible el corazón de este pueblo, endurece sus oídos, y nubla sus ojos, no sea que vea con sus ojos, y oiga con sus oídos, y entienda con su corazón, y se arrepienta y sea curado.
Isa 6:11 Entonces dije yo: ¿Hasta cuándo, Señor? Y El respondió: Hasta que las ciudades estén destruidas y sin habitantes, las casas sin gente, y la tierra completamente desolada;
Isa 6:12 hasta que el SEÑOR haya alejado a los hombres, y sean muchos los lugares abandonados en medio de la tierra.
Isa 6:13 Pero aún quedará una décima parte en ella, y ésta volverá a ser consumida como el roble o la encina, cuyo tronco permanece cuando es cortado: la simiente santa será su tronco.
Isa 7:1 Y aconteció que en los días de Acaz, hijo de Jotam, hijo de Uzías, rey de Judá, subió Rezín, rey de Aram, con Peka, hijo de Remalías, rey de Israel, a Jerusalén para combatir contra ella, pero no pudieron tomarla.
Isa 7:2 Y se dio aviso a la casa de David, diciendo: Los arameos han acampado en Efraín. Y se estremeció el corazón del rey y el corazón de su pueblo como se estremecen los árboles del bosque ante el viento.
Isa 7:3 Entonces el SEÑOR dijo a Isaías: Sal ahora al encuentro de Acaz, tú, y tu hijo Sear-jasub, al extremo del acueducto del estanque superior, en la calzada del campo del Batanero,
Isa 7:4 y dile: "Estate alerta, y ten calma; no temas ni desmaye tu corazón ante estos dos cabos de tizones humeantes, a causa de la ira encendida de Rezín de Aram y del hijo de Remalías.
Isa 7:5 "Porque Aram ha tramado mal contra ti, junto con Efraín y el hijo de Remalías, diciendo:
Isa 7:6 'Subamos contra Judá y aterroricémosla, hagamos una brecha en sus murallas y pongamos por rey en medio de ella al hijo de Tabeel.'
Isa 9:6 Porque un niño nos ha nacido, un hijo nos ha sido dado, y la soberanía reposará sobre sus hombros; y se llamará su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
Isa 9:7 El aumento de su soberanía y de la paz no tendrán fin sobre el trono de David y sobre su reino, para afianzarlo y sostenerlo con el derecho y la justicia desde entonces y para siempre. El celo del SEÑOR de los ejércitos hará esto.